29 de abril de 2011

♥'.


No eras tú. Yo no conocí a otra persona. ¿Sabes? Me gustabas y... cambiaste. Eras romántico, cariñoso, estabas pendiente de mí en cada segundo en el que estábamos juntos. Por ti sentí mil y una cosas, mil y un sentimientos y soñé, soñé contigo cada noche. Volar no era un deseo imposible si estabas a mi lado. Tuvimos enfrentamientos, peleas, batallas, guerras... da igual como lo llamásemos, si al final de todo volvíamos a estar juntos. Reconstruimos demasiadas veces lo que un día fue un cuento de princesas en el que tú eras mi príncipe, pero ya los cimientos no se pueden volver a crear. No dan a más. Esto terminó hace tiempo, pero no lo reconocíamos. No nos engañemos, por favor. Ya no quedan cenizas de donde un día hubo fuego.

Yo no tengo miedo a la muerte, simplemente es que es la única cita a la que quiero llegar tarde.

Vamos a bajarnos de este mundo que gira tan deprisa y vamos a sonreir. Es momento de recordar todo aquello que nos ha hecho felices. Que estos tiempos son dificiles y no viene mal de vez en cuando tomarse un respiro para darnos cuenta que esta vida pasa demasiado deprisa, que casi sin darnos cuenta han pasado más de mil momentos que nos han hecho reir, llorar, disfrutar o rabiar. Porque equivocarse no es otra cosa que coger un camino distinto al correcto, los malos senderos también hay que caminarlos. Caer no es más que pararse a descansar un instante. La vida es como montar en bici, se aprende a base de ostias. Pararse a pensar y recordar viejas experiencias, ya sean buenas o malas. Escuchar una canción y que los ojos se te llenen de lágrimas, bien de alegria o bien de tristeza. Mirar fotos, leer diarios, ver vídeos... Algo que nos haga desconectar de este universo de locos y darnos cuenta que cada segundo es un momento almacenado en nuestra vida. Tropezar y que nos duela sólo significa que estamos vivos, que sentimos, que exisitmos. Nadie sabe qué le deparará el futuro, pero de eso se trata, de caminar a ciegas y sorprenderse de lo que te espera. Yo no tengo miedo a la muerte, simplemente es que es la única cita a la que quiero llegar tarde.

25 de abril de 2011

Never

Puedes romper mi sueño, pero jamás romperás mis ganas de soñar.

Game over


La noche cae en vela y yo, pienso que aún podría ser peor, me mantiene en pie tan sólo el instinto. Y es que me falta el aire. Te explico el juego, contarás hasta cincuenta, y mientras cuentas te irás olvidando poco a poco de mi. De mi vida, de que te conozco, de los momentos, y de todo. Al contar cincuenta, yo me habré escondido para no volver a verte, y tu no me puedes buscar. Si me encuentras has perdido. Es sencillo, pero no fácil.

22 de abril de 2011

Queda prohibido;

Queda prohibido llorar sin aprender. Levantarte un día sin saber que hacer. Tener miedo a tus recuerdos. Queda prohibido no sonreír a los problemas, no luchar por lo que quieres. Abandonarlo todo por miedo, no convertir en realidad tus sueños. Queda prohibido no demostrar tu amor, hacer que alguien pague tus deudas y el mal humor. Queda prohibido dejar a tus amigos, no intentar comprender lo que vivieron juntos, llamarles solo cuando los necesitas. Queda prohibido no ser tú ante la gente, fingir ante las personas que no te importan, hacerte el gracioso con tal de que te recuerden, olvidar a toda la gente que te quiere. Queda prohibido no hacer las cosas por ti mismo, tener miedo a la vida y a sus compromisos, no vivir cada día como si fuera un ultimo suspiro. Queda prohibido echar a alguien de menos sin alegrarte, olvidar sus ojos, su risa,todo porque sus caminos han dejado de abrazarse,olvidar su pasado y pagarlo con su presente. Queda prohibido no intentar comprender a las personas, pensar que sus vidas valen mas que la tuya. No saber que cada uno tiene su camino y su dicha. Queda prohibido no crear tu historia, no tener un momento para la gente que te necesita. No comprender que lo que la vida te da, también te lo quita. Queda prohibido no buscar tu felicidad, no vivir tu vida con una actitud positiva. No pensar en que podemos ser mejores, no sentir que sin ti este mundo no sería igual.

19 de abril de 2011

La vie

Nadie nos dijo que la vida iba a ser fácil, solo prometieron que valdría la pena vivirla.
Si quieres pedir perdón y decirle a aquella persona que la quieres, hazlo.
Si tienes ganas de cantar una canción, cántala y sé feliz.
Si unas lágrimas se asoman en tus ojos, déjalas brotar y desahógate.
Si te viene el deseo de reír, ríe y contagia tu alegría.
Si vas a dar un consejo, mejor sugiere para no equivocarte.
Si tienes sueños, hazlos realidad esforzándote más.
Piensa que estando mal no se arregla nada.
Piensa que no vale la pena perder una sonrisa de oreja a oreja por simples suposiciones.
Piensa que hay personas que tanto en los momentos buenos como en los malos van a estar ahí para apoyarte.
Hay momentos en los que pararías el tiempo en seco, momentos que te gustaría repetir una y otra vez, momentos que ahora recuerdas y se quedan en eso... En un recuerdo.
La vida da muchas vueltas y al final cada uno acaba con lo que le pertenece, tú eres quien debe mover las piezas de su vida en cada partida, y sobre todo sin rendirte ante ninguna derrota y sabes que nada ni nadie te debe hacer pensar lo contrario. La vida es gratis, pero cuesta mucho.

15 de abril de 2011

Hay cosas que nunca entenderé

¿Recuerdas cuando eras pequeño y no querías comer? Te intentaban hacer creer que la cuchara con el puré de verduras era un avión. De hecho creían que lo único que le faltaba para ser verosímil era el sonido del motor. Y ahí les veías haciendo el BRRRRRRRR. Además te hacían responsable de la buena alimentación de toda tu familia: 'Esta por papá. Esta por mamá. Esta por la tita' O sea, tenías que comer tú por todos.

¿O cuando para conseguir que nos durmiésemos se inventaron las nanas? La música era apropiada, pero fallaban en la letra, como ésa que decía: "Duérmete niño, duérmete ya, que viene el Coco y te comerá" Y tú pensado: "¿Cómo? ¿Que va a venir quién? Después de la información que me acabas de proporcionar ¿tú quieres que yo me duerma?" Así que te pasabas toda la noche con los ojos como platos, no fuera a ser que le diera por aparecer al maldito coco. Así al menos si venía te pillaba despierto. Y como conclusión, la frase con la que los padres ponían fin a todas nuestras preguntas: "Mamá ¿Por qué los chicos son tan raros?" Hija, cuando seas mayor lo entenderás. Pues también en eso nos mintieron. Porque querida mamá, yo ya soy mayor y SIGO SIN ENTENDERLOS.